A veces, para encontrar joyas no es necesario visitar grandes museos con impresionantes obras pictóricas y esculturales.
Los pueblos o ciudades pequeñas muchas veces encierran y albergan tesóros naturales como cuevas, lagos etc...Donde se puede practicar multitud de actividades y disfrutar de sus riquezas.
Son paisajes bellos e insólitos que cuando los visitemos debemos cuidarlos y respetarlos para que no se aprecie la huella humana que ocasiona muchas veces más suciedad y daño que el transcurso de cientos de años.
Os presento la isla del Hierro y sus rincones olvidados con mucha magia, espero que les guste y que la conozcan, disfrutando de esta preciosa y desconocida isla. Un saludo.
Publicado por Raquel Vieco Martinez
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